El artículo que os presentamos a continuación muestra lo bien acondicionadas que están las oficinas de la empresa Google, y, al mismo tiempo, propone algunas sencillas soluciones que ofrece la Red para hacer que nuestro lugar de trabajo se asemeje un poco más a las dependencias del gran buscador (pero sin agobios).
Las oficinas de Google están pensadas para que el empleado saque el máximo rendimiento a sus capacidades. De este modo, se cuenta con las más completas instalaciones para hacer compatible el tiempo libre con el laboral (eso sí, sin salir del lugar de trabajo). En la sede de Google en Zúrich el novato pierde la vergüenza el primer día de trabajo gracias al tobogán que conecta la zona de oficinas de la primera planta con la cafetería y el gimnasio. Para su presentación en sociedad deben deslizarse por él llevando un sombrero de colores del cuál no se podrán desprender durante varias horas.
Para que el cuerpo se mantenga en perfectas condiciones existe una espectacular sala de masajes con sillones vibradores gratuitos y con masajistas profesionales. El servicio de estos últimos debe ser abonado por el empleado que lo solicite aunque la empresa subvenciona y regala diferentes bonos de masaje. En Internet existen multitud de páginas que recomiendan sencillos ejercicios para realizar en la oficina. Pincha en http://www.yogaparaempresas.com.ar/ y sigue los pasos para relajar el cuello y hombros. No es lo mismo, pero ayuda a eliminar tensiones. En algunas de las oficinas que Google tiene repartidas por el mundo se han instalado peluquerías por si necesitas hacerte un inminente cambio de look. Os recomendamos una página web que simula diferentes peinados y colores de pelo en tu propia fotografía. Puedes hacer tantas pruebas como quieras y más tarde acercarte a tu peluquería de confianza y hacerlo realidad. Entra en http://www.peinadosvirtuales.com/ y pruébalo. Para cambiar tu look de manera gratuita puedes visitar http://www.beautyriot.com/instant_makeover.
Volviendo a Google, la empresa ha acondicionado diversas salas de ocio para que el trabajador administre el tiempo libre a su antojo: pueden ver una película, jugar al billar, al futbolín o con la consola.
Artículo de Beatriz L. Tudela para La Réplica.